Mostrar más resultados

Macronutrientes y micronutrientes: ¿en qué se diferencian?

Macronutrientes y micronutrientes: ¿en qué se diferencian?

Escrito por Dolors Capdevila

Para poder comprender el concepto de equilibrio alimentario, se deben conocer todos los actores, tanto los principales (macronutrientes) como los secundarios (micronutrientes) a pesar de que los secundarios se precisan en cantidades inferiores todos ellos juegan un papel importante para asegurar el correcto estado de salud del organismo. Para poder presentar las diferencia entre ambos conceptos, primero los vamos a describir y a continuación entraremos a detallar los aspectos diferenciadores.

Macronutrientes y micronutrientes

Macronutrientes

En el grupo de los macronutrientes encontramos las proteínas, los glúcidos y los lípidos, se denominan macronutrientes ya que nuestro organismo los precisa en cantidades significativas para que pueda funcionar con normalidad, las necesidades para cada individuo se determinan en gramos y en una dieta equilibrada se recomienda un consumo en la siguiente proporción:

  • Glúcidos del 50 al 60%
  • Lípidos del 30 al 35%
  • Proteínas del 12 al 15%

A pesar de no ser un nutriente sino un alimento, en este punto también se debe mencionar el agua, es un alimento básico que no aporta energía pero que se debe asegurar para mantener el equilibrio del organismo, el agua debe estar presente en cualquier dieta equilibrada, las recomendaciones diarias de agua son de 1,5 a 2L.

Para ampliar el concepto, puedes consultar el siguiente post:  ¿Sabes qué son los macronutrientes?

Micronutrientes

Respecto a los micronutrientes, como ya hemos visto, los precisamos en cantidades pequeñas pero no por eso son menos importantes, dentro de este grupo se hallan las vitaminas y minerales. Es básico asegurar el consumo adecuado de cada uno de ellos para asegurar el correcto funcionamiento del organismo, el consumo deficitario puede causar alteraciones importantes y algunas enfermedades graves, si se realiza una dieta equilibrada se pueden cubrir los requerimientos mínimos que precisa el cuerpo humano.

Se ha identificado 13 vitaminas imprescindibles para el organismo y son las vitamina A, C, D, E, K y ocho vitaminas del grupo B: tiamina, riboflavina, niacina, ácido pantoténico, biotina, vitamina B 6,  vitamina B 12, folato o ácido fólico.

A continuación se detallan los aspectos más significativos relacionados con la función de cada una de ellas:

  • Vitamina A o retinol: participa en la función de protección en la piel y la visión.
  • Vitamina C: permite la síntesis del colágeno que participa en la cicatrización, es un potente antioxidante y participa en el metabolismo de las grasas.
  • Vitamina D: tiene una función principal en la absorción del calcio y fósforo, esta vitamina se puede sintetizar en la piel con una exposición solar, se recomienda sobretodo en los niños para evitar el raquitismo.
  • Vitamina E: tiene funciones en la síntesis muscular y de los glóbulos rojos.
  • Vitamina K: la función principal es participar en la coagulación de la sangre.
  • Vitaminas del grupo B: principalmente es participan en el metabolismo de los hidratos de carbono, cada una de las vitaminas que forman el grupo de las B tiene funciones concretas.

Una característica significativa de las vitaminas es su propiedad fisicoquímica, las vitaminas B y C son hidrosolubles, dichas vitaminas se deben consumir diariamente en la dieta pero no se almacenan en el organismo es por ello, que se debe asegurar el consumo regular y continuado. Por otro lado, las vitaminas A, D, E y K son vitaminas liposolubles y se pueden almacenar las partes grasas del organismo. Las necesidades de vitaminas se determinan en microgramos o miligramos.

Respecto a los minerales, los que realizan funciones más específicas en el organismo son el calcio fósforo, hierro y magnesio que se deben consumir en miligramos y el zinc, yodo y selenio en microgramos.

Cómo ya hemos visto, la principal diferencia entre macronutrientes y micronutrientes se relaciona con las cantidades que precisa nuestro organismo. La causa principal de esta diferencia es que los macronutrientes pueden realizar diferentes funciones en el organismo y también son capaces de aportar energía en cambio, las vitaminas y minerales casi no aportan energía, su función principal es participar en determinados procesos metabólicos.

Tal y cómo se ha comentado anteriormente, algunas vitaminas se pueden almacenar en el organismo debido a sus propiedades liposolubles, las vitaminas A, D, E y K  se pueden almacenar tanto en el tejido graso cómo en el hígado, es importante destacar que un consumo excesivo de estas vitaminas puede resultar nocivo para el organismo. He ha evidenciado que un consumo superior de vitamina A, puede incrementar el riesgo de hemorragias o problemas en la formación del hueso, un consumo excesivo de vitamina E se relaciona con trastornos metabólicos. Los macronutrientes también tienen capacidad de almacenaje ya que forman estructuras o se almacenen en forma de reservas.

En el caso de las vitaminas hidrosolubles, como no se pueden almacenar se debe asegurar el consumo regular para que no se produzcan alteraciones cómo el escorbuto, déficit de vitamina C o alteraciones del metabolismo energético en déficits de vitaminas del grupo B.

En este blog hemos repasado el concepto de macronutrientes e introducido los micronutrientes,  las vitaminas y minerales son componentes básicos que debemos asegurar en cualquier dieta equilibrada ¿Quieres aprender más? ¿Te atreves a iniciarte en el apasionante mundo de la alimentación y nutrición? Consulta nuestro Curso Superior de Nutrición y Herbodietética e infórmate sin compromiso.