Seis consejos para mantener una flora intestinal sana y equilibrada
La flora intestinal está formada por billones de microorganismos entre los que destacan las bacterias, con capacidad para realizar funciones protectoras, metabólicas y troficas. Según la etapa de la vida (infancia, adultez, envejecimiento) la flora intestinal puede variar en su composición bacteriana y en sus funciones, en este sentido los cambios fisiológicos y el tipo de alimentación son factores importantes que influyen en dicha variación. Además de estos, existen otros que pueden alterar la microbiota del intestino como, la toma de fármacos, el estrés y las bajas defensas inmunológicas; pudiendo influir negativamente en la salud de las personas.
En este artículo mencionaremos algunos consejos para mantener una flora intestinal sana y equilibrada y, que además, beneficien su buen funcionamiento.
Beneficios de la flora intestinal.
Mantener en condiciones la microbiota del intestino es vital para que se realicen correctamente las siguientes funciones:
- Resistencia ante las infecciones y el estrés.
- Desarrollo de la función de barrera impidiendo el crecimiento de otras bacterias indeseables o patógenas.
- Diferenciación y desarrollo de las células epiteliales encargadas de transmitir señales para activar los mecanismos de defensa, es decir, una correcta función inmunitaria.
- Metabolismo de restos dietéticos no digeribles (fibras fermentables) y producción de sustancias activas que benefician la salud.
Seis consejos para mantener una flora intestinal en buenas condiciones.
La interacción entre las diversas especies de bacterias beneficiosas produce una flora saludable capaz de impedir la colonización de bacterias patógenas. Por ello, es importante mantener el equilibrio de la flora intestinal.
A continuación, describimos seis consejos que pueden ayudar al mantenimiento de una flora intestinal sana:
- Incluir en la dieta alimentos prebióticos, que son sustancias utilizadas por los microorganismos intestinales. Se trata de alimentos ricos en fibra altamente fermentable cuyo procesamiento en el intestino da lugar a la formación de ácidos grasos de cadena corta (AGCC) como el butírico, el propiónico y el acético. Estos ácidos grasos proporcionan energía a los colonocitos (células del colon) y han demostrado tener efectos sobre el colesterol y mejorar la sensibilidad a la insulina. Dentro de los tipos de fibra prébiotica tenemos: los fructooligosacáridos o FOS (inulina), galactooligosacáridos o GOS (legumbres), los mucílagos, las pectinas (manzanas) y los beta-glucanos (avena).
- Incluir en la dieta el consumo de alimentos fermentados como el yogur, que aporta bacterias beneficiosas al intestino. En este punto se debe resaltar que los beneficios se obtienen solo del yogur, y no de otros postres lácteos que erróneamente consideramos yogur y no lo son. También podemos obtener beneficios de otros alimentos fermentados como, el choucrute (col fermentada), el kéfir, el té de kombucha o el miso (pasta de soja fermentada).
- Consumir alimentos ricos en polifenoles, diversos estudios han constatado que el consumo de estas sustancias antioxidantes favorecen el crecimiento de ciertas especies bacterianas que benefician la flora y, por otro lado, los polifenoles que llegan al colon sin ser absorbidos se metabolizan en éste, dando lugar a la formación de moléculas más pequeñas y beneficiosas que pueden absorberse con mayor facilidad.
- Ante la toma de medicamentos como los antibióticos que provocan alteraciones en la flora intestinal y eliminan gran parte de la flora beneficiosa, será recomendable la toma de un suplemento de probióticos, especialmente, para reducir la incidencia de diarreas y el dolor abdominal. Los suplementos de probióticos se pueden tomar al mismo tiempo que el tratamiento antibiótico para reducir los efectos secundarios que produce la toma del medicamento.
- Tomar medidas para tratar o aliviar las situaciones de ansiedad y estrés, ya que pueden influir en el buen estado de la microbiota intestinal. A su vez, diversos estudios van demostrando que el buen estado de la flora intestinal es garantía de nuestro buen estado fisiológico pero también del psicológico.
- Y no podemos dejar de mencionar la práctica de ejercicio físico que favorece la movilidad y el tránsito intestinal. La correcta evacuación intestinal es importante para eliminar los desechos y sustancias tóxicas del organismo.
Como podemos ver, la flora intestinal interviene en numerosas funciones, unas ya comprobadas y otras aún en estudio, pero dados los avances en investigación que se van realizando pronto conoceremos más sobre este nuevo órgano. Mientras tanto, lo recomendable es ir siguiendo los consejos que se dan para mantener una flora sana, que la afecten positivamente y, como resultado, beneficien nuestra salud.
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