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Preguntas comunes sobre la nutrición infantil

Preguntas comunes sobre la nutrición infantil

Escrito por Alicia Pardo Crego

Alimentar a los/as más pequeños/as de la casa no es tarea fácil. En las familias surgen muchas preguntas sobre la nutrición infantil más adecuada, a lo que hay que sumar las propias preferencias y actitudes de los/as niños/as frente al plato de comida.

La niñez supone una etapa crucial en la que se deben recibir todos los nutrientes necesarios y en la que hay que ser cuidadoso/a para evitar reacciones alérgicas, atragantamientos e incluso dolencias futuras. Nunca está de más consultar a un/a profesional o formarse uno/a mismo/a con un programa como el Curso Superior de Alimentación y Nutrición Pediátrica de Deusto Salud, pero puedes empezar informándote en este artículo. ¡Resuelve las dudas más habituales!

¡Estas son las dudas más frecuentes sobre la nutrición en niños!

Cuando se tiene un/a hijo/a, hacerse cientos de preguntas sobre nutrición infantil se vuelve algo inevitable. No sabes cuándo puede empezar a tomar cierto alimento o si está bien que le permitas comerse esa barrita de chocolate todos los viernes.

La lactancia es otro de los grandes dilemas a los que se enfrentan madres y padres en los primeros meses de vida. Además, si has estudiado cuáles son los tipos de obesidad infantil y su incidencia en la población ―el 18% de los/as niños/as españoles/as la sufren, según el Ministerio de Sanidad―, querrás saber cómo evitarla a toda costa.

El 18% de los/as menores en España sufre un problema de obesidad infantil, según indican fuentes del gobierno

A continuación, te damos algunas indicaciones para ayudar a los/as más pequeños/as a construir una relación sana con la comida. ¡Pero no olvides consultar a un profesional para profundizar en los detalles!

¿Cuándo pueden empezar a tomar alimentos sólidos?

Mientras son muy pequeños, los/as bebés se alimentan exclusivamente de leche, ya sea materna o de fórmula. De ella extraen los nutrientes que precisan en esta etapa vital, que dura aproximadamente hasta los seis meses. A partir de entonces, deben empezar a consumir alimentos sólidos, normalmente en forma de papillas que incluyan vegetales, proteínas, frutas e hidratos de carbono. Al alcanzar los dos años, ya tendrán que tener una dieta sólida.

¿Son recomendables los productos infantiles de los supermercados?

Depende del producto. Lo mejor es leer detenidamente la etiqueta antes de optar por una de estas soluciones, ya que es común que el marketing nos provoque dudas sobre el grado de nutrición infantil que ofrecen y la calidad de la misma.

En muchos envases se indica que un alimento es “90% calcio” o tiene “fibra y vitaminas” especiales para los/as más pequeños/as. Sin embargo, gran parte de estos preparados tienen una cantidad excesiva de azúcares ―un/a niño/a no debe sobrepasar las dos cucharadas diarias― o de grasa, por lo que se recomienda dejar alimentos como yogures bebibles, batidos o zumos enlatados para ocasiones puntuales.

¿Cómo debo actuar ante los ultraprocesados?

Esta es una de las preguntas sobre nutrición infantil más frecuentes, y lo más habitual es que la respuesta que se dé es que hay que restringirlos. Sin embargo, prohibirle a un/a niño/a un alimento o hacer que lo entienda como “malo” solo incrementará su deseo por él y fomentará que pueda caer en un Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA) en la adolescencia.

Evidentemente, hay que asegurarse de que recibe un menú completo a nivel nutricional. No obstante, ganará en calidad de vida si ayudamos a que sea un/a “comedor/a intuitivo/a”, es decir, que tome alimentos variados en el momento en el que le apetezca y en una cantidad saludable… Incluyendo los ultraprocesados y sin hacer diferencias “morales”.

Prohibir un alimento aumenta el deseo por él y fomenta que el/la niño/a termine dándose atracones

Ahora bien, está claro que estos no deben dominar la dieta. Hay que saber cómo planificar un menú saludable, de manera que cada plato tenga verdura (50%), proteínas (25%) e hidratos (25%). Se recomienda que tomen pescado unas cuatro veces por semana, y, a diario, tres frutas y dos lácteos (leche, queso, yogures…).

Mi hijo/a no quiere terminarse el plato, ¿qué debo hacer?

De las preguntas sobre nutrición infantil, esta es sin duda una de las que más preocupa a los/as progenitores/as. Sin embargo, y como acabamos de indicar, trabajar en que el/la menor sea un/a “comedor/a intuitivo/a” puede evitarle mucho sufrimiento.

Eso conlleva permitir que se guíe por su sensación de saciedad. No le/la obligues a si no tiene ganas y déjale comer de nuevo cuando lo pida, siempre que no detectes indicios de causas patológicas.

¿De qué forma hay que introducir nuevos alimentos?

Uno a uno y en momentos en los que el/la niño/a vaya a estar bajo nuestra vigilancia ―por ejemplo, en casa―, de manera que podamos reaccionar rápidamente si se produce alguna reacción. Las comidas son un buen momento, ya que tendremos toda la tarde para ver si le causan malestar y es preferible dejar pasar unos cuantos días entre cada nuevo ingrediente que sumemos.

Los alimentos que suelen provocar más alergias son el marisco, el pescado y los frutos secos, así como ciertas frutas como las fresas y la piña. Sin embargo, ya no hay que seguir ningún orden para introducirlos. Si el/la menor muestra reticencia a probar nuevos sabores, se le pueden presentar en distintas texturas o preparados, o con una presentación divertida que capte su atención.

¿Le doy la fruta con pela o sin pela?

A partir del año, dejar la cáscara es correcto, menos en los albaricoques, los melocotones y las nectarinas, que pueden resultar peligrosas al menos hasta los dos años. Recuerda también que, a la hora de tratar determinas piezas, tendrás que tomar precauciones adicionales: las uvas y las cerezas, por ejemplo, conviene partirlas en trozos para evitar atragantamientos.

¿Cuándo puedo darle leche de vaca a mi hijo/a?

Desde que cumple el año ya no hace falta leche de fórmula, otro de los compuestos que más preguntas sobre nutrición infantil suscita. Se puede usar leche entera, más completa, aunque evitando excederse en la cantidad diaria.

¿Los niños/as pueden seguir una dieta vegana?

, siempre que los/as progenitores/as se asesoren adecuadamente sobre aspectos como las fuentes de calcio alternativas a la leche y a las proteínas. Un profesional puede darte las reglas básicas para preparar recetas saludables y completas, aunque no incluyan alimentos de origen animal. Por ejemplo, recurriendo al aceite, las semillas y las legumbres.

¡Especialízate con un curso en nutrición pediátrica!

¿Quieres ayudar a los/as más pequeños/as a llevar una dieta equilibrada? Entonces debes conocer a fondo las necesidades nutricionales que tienen en cada etapa de su desarrollo y cómo afrontar los tipos de intolerancias más comunes.

El Curso Superior de Alimentación y Nutrición Pediátrica de Deusto Salud te dará las bases que precisas para crear menús con los que crezcan sanos y fuertes. Al finalizar, dispondrás de dos diplomas, uno propio de nuestro centro y otro de la Universidad Católica de Murcia (UCAM), que demostrarán tus conocimientos para responder a la inmensa mayoría de preguntas sobre nutrición infantil. ¡Infórmate!