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Competencias básicas de un asistente de geriatría o persona cuidadora

Competencias básicas de un asistente de geriatría o persona cuidadora

Una de las profesiones más demandadas en la actualidad y que se prevé que en el futuro sea una de las profesiones con más salidas en el mercado laboral es la de auxiliar o asistente de geriatría, puesto que como todos sabemos, la población en España y en la mayoría de países europeos está cada vez más envejecida, y, por lo tanto, cada vez habrá gente más mayor que necesitará cuidados. Por eso es importante saber qué competencias básicas debe tener una persona que quiera dedicarse al cuidado de personas mayores. ¿Quieres dedicarte a este ámbito sanitario? ¡Quizás te interese nuestro curso de geriatría y gerontología!

Pero empecemos por el principio y veamos antes cuáles son básicamente sus funciones y por qué es fundamental la figura del cuidador en la calidad de vida del anciano.

Funciones de un o una asistente de geriatría

Dependiendo de si el trabajo es a domicilio o en una residencia, las tareas pueden variar bastante, pero vamos a intentar listar las funciones más importantes y las que suelen darse tanto a domicilio como en un centro de geriatría.

  • Ayudar en la movilización y desplazamiento de las personas mayores: y esto incluye asistirlos en todos los movimientos que los pacientes no puedan llevar a cabo por ellos mismos, desde ayudarlos a levantarse de la cama o a acostarse, pasando por acompañarlos hasta el aseo, o hasta el comedor, ayudándolos a sentarse en la silla o un sillón o ayudándoles a dar un paseo ya sea por el jardín de la residencia o de la casa o bien un paseo por la calle, por ejemplo.
  • En los pacientes encamados habrá que hacerles movilizaciones en la cama: sobre todo cambios de postura para evitar úlceras por decúbito, pero también habrá que llevar a cabo movilizaciones de brazos y piernas para mejorar la circulación, no perder tono y masa muscular y evitar el deterioro de las articulaciones.
  • También habrá que asistirlos en su higiene diaria: ya sea ayudarlos con la ducha o el baño, o a peinarse y arreglarse, ayuda con el afeitado, higiene bucal…
  • Hacerles las camas, ayudarles a arreglar la habitación y recoger la ropa sucia.
  • Dar de comer a los pacientes que no puedan hacerlo por ellos solos o ayudarlos durante las comidas en lo que precisen.
  • En los pacientes incontinentes habrá que hacerles el cambio de pañal cuando sea necesario y vaciar las bolsas de diuresis en los que vayan sondados.
  • Llevar a cabo pequeñas tareas sanitarias como aplicación de cremas o pomadas, cambio de apósitos, ayudarlos en las tomas de la medicación prescrita, toma de las constantes vitales si es necesario (temperatura, tensión arterial, frecuencia cardíaca…), etc. Tareas estas que deben ser siempre prescritas o supervisadas por un médico o una enfermera.

Competencias básicas que debe tener un o una auxiliar de geriatría

Para llevar a cabo las tareas que hemos explicado en el apartado anterior, consideramos que la persona que quiera cuidar a personas mayores debería tener entre otras, las siguientes competencias y habilidades:

  • Capacidad de trabajar en equipo, puesto que normalmente en el cuidado de las personas mayores nos encontraremos que hemos de trabajar con varios profesionales como médicos, enfermeras, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, asistentes sociales, podólogos, psicólogos, etc.
  • Facilidad de comunicación y buena capacidad de escucha. Debemos tener en cuenta que muchas personas mayores se encuentran muy solas y a veces, lo que más necesitan es tener a alguien con quien hablar.
  • Voluntad de aprender y querer mejorar siempre. Esta es una actitud muy importante en el campo sanitario en general, pues siempre hay cosas que aprender y mejorar.
  • Saber dar un trato humano. Esto incluye muchos aspectos, desde ser personas muy respetuosas con la privacidad de cada persona, hasta ser personas empáticas y saber ponernos en el lugar de la persona mayor, lo que nos ayudará también a tratarlo con el respeto y la comprensión que se merece.
  • Saber fomentar la autonomía y la independencia de los ancianos, esto implica saber hacerlo partícipe de sus cuidados dándole seguridad y tranquilidad.
  • Saber ser paciente. Cuidar a personas mayores supone muchas veces una carga de trabajo y un nivel de estrés importantes. Tengámoslo en cuenta, pues esto nos ayudará también no solo a cuidarlos a ellos, sino también a cuidarnos a nosotros.
  • Ser personas positivas. A medida que las personas nos vamos haciendo mayores, la labilidad emocional, la tristeza y las ganas de no hacer nada son características que frecuentemente suelen ir apareciendo. Debemos ayudarlos con nuestra actitud, siendo personas alegres y positivas en el día a día.

La lista de competencias y habilidades básicas que deben tener los auxiliares de geriatría podría ser muy larga y podríamos encontrar multitud de aptitudes necesarias para cuidar a personas mayores. ¿Qué otras habilidades añadirías a la lista anterior? ¿Qué aptitudes crees que también son necesarias y que no hemos mencionado en el post?

Montserrat Capdevila

Diplomada en Enfermería en la Escuela Universitaria de Enfermería de Girona y en Empresariales por la Universitat Oberta de Catalunya, con un máster en Logopedia por la Universidad de Barcelona. Ha realizado diversos cursos de especialización, tanto en el área de enfermería como de empresariales. Dispone de amplia experiencia como enfermera en diferentes servicios médicos. Actualmente, es gerente y co-propietaria de una empresa, tarea que compagina con la docencia.