Como mejorar el dolor articular con naturopatía

La Artritis puede aparecer en cualquier etapa de la vida pero, con frecuencia, suele manifestarse con el paso de los años. Este problema de salud puede ir acompañado de inflamación y, en casos avanzados, de rigidez. Puede presentarse en una o varias articulaciones, dependiendo de lo afectada que esté la persona. Además, el dolor es fluctuante siendo mayor por las mañanas.
Como tratamiento para aliviar el dolor y la inflamación se recurre al uso de analgésicos y antiinflamatorios, pero existen otros tratamientos naturopáticos, que bien empleados, pueden ser una herramienta de ayuda para mejorar el dolor articular.
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Tabla de contenidos
Causas del dolor articular
El dolor articular puede aparecer por diferentes factores:
- Lesiones o fracturas: accidentes, deporte excesivo, cirugía…
- Hereditarios: anatomía.
- Osteoartritis
- Sobrepeso u obesidad
Todo esto ocasiona que se produzca un desgaste en las articulaciones que con el paso de los años, se va haciendo más notorio.
Tratamientos de Naturopatía para el dolor articular
El dolor articular aparece debido a la degeneración y desgaste que se produce en los cartílagos y en los huesos, siendo las zonas mayormente afectadas las rodillas, la cadera, los dedos y cervicales.
Este dolor puede aliviarse cuando la persona descansa y empeorar cuando se realiza actividad física.
Para paliar el dolor se emplean fármacos como primera medida, pero también se puede recurrir a la Naturopatía.
Como ejemplos de terapias naturales para mejorar el dolor articular, tenemos:
- Terapia con calor, la aplicación de calor es efectiva para tratar el dolor que produce la artritis, gracias a que aumenta la circulación sanguínea de la zona afectada y elimina la tensión articular, permitiendo su movilidad.
Para poder aplicar este calor se utilizan bolsas de agua caliente, almohadillas de calor, paños de agua caliente y cataplasmas, en este caso se puede aprovechar en utilizar la infusión caliente de una planta medicinal con propiedad analgésica. También los baños o duchas de agua caliente son de ayuda.
La aplicación de calor se debe hacer a intervalos, es decir, aplicar calor durante 15 o 20 minutos y retirar durante el mismo tiempo, y volver a aplicar. No se debe aplicar el calor durante un tiempo prolongado.
- Fitoterapia, el uso de plantas medicinales es un buen aliado para reducir el dolor y la inflamación de las articulaciones. Como formas de administración se pueden encontrar desde infusiones (casos leves) hasta cápsulas o extractos con mayor concentración (casos más avanzados). Dentro de las principales plantas que se emplean, tenemos: Cúrcuma (Curcuma longa), Harpagofito (Harpagophytum procumbens), Sáuce (Salix alba), Grosellero negro (Ribes nigrum), Boswellia (Boswellia serrata).
- Nutracéutica, así como se emplean plantas medicinales en formas concentradas para mejorar el dolor articular, también se ha visto que el consumo de nutrientes en mayores concentraciones es otra buena y eficaz opción. Dentro de este grupo destacan nutrientes como, la glucosamina y la condroitina, el metilsulfonilmetano (MSM) o el ácido hialurónico, que de forma natural se encuentran formando parte de los huesos y articulaciones y, por ello, su aporte a largo plazo evita la pérdida de estos nutrientes por el avance de la edad. Estos nutrientes tienen capacidad para retener humedad, ayudar a fortalecer el tejido conectivo y contribuyen a reducir el dolor y la inflamación. El aporte de diferentes minerales como, magnesio, calcio, silicio, manganeso, entre otros, ayudan a mantener en buen funcionamiento el sistema articular. Así como también, las vitaminas C y D.
- Alimentación, mantener un peso saludable será conveniente para evitar que se agraven los síntomas ocasionados por la artritis, sobre todo, si están afectadas las rodillas. El exceso de peso favorece el desgaste de las articulaciones y aumenta la inflamación. Si es necesario, se debe recurrir a un especialista en alimentación para que oriente sobre que alimentos son convenientes para reducir la inflamación y cuales es mejor limitar.
- Flores de Bach, el dolor puede ocasionar alteración en las emociones y sufrimiento pudiendo darse cuadros de ansiedad y depresión, lo que afectará en mayor o menor medida, dependiendo de la incapacidad que perciba la persona. Por este motivo, será importante la intervención de un terapeuta floral que ayude a prevenir que estas emociones alteradas puedan llegar a empeorar el problema. En estos casos la psicoterapia también puede dar resultados positivos.
Por último, se debe diferenciar la Artritis que comentamos hasta este momento, de la Artritis Reumatoide. Esta última es una afección autoinmune, en donde el propio sistema inmunitario daña el revestimiento de las articulaciones (membrana sivovial), lo que causa dolor e inflamación, y el desgaste de la articulación y del hueso.
Suele afectar a las articulaciones de los dos lados del cuerpo, siendo las zonas más afectadas: tobillos, hombros, cuello, mandíbula, codos, muñecas y pies. Y no suele aliviarse con el descanso.
Para el alivio de sus síntomas también suelen emplearse los tratamientos antes mencionados, pero además será conveniente el consumo de ácidos grasos Omega-3 (EPA) y el ácido gammalinolénico que actúan como antiinflamatorios.
Aquí se dejan algunos ejemplos de terapias empleadas en Naturopatía para mejorar el dolor articular, pero si quieres conocer más sobre ellas, te recomendamos nuestro curso de Naturopatía.