El envejecimiento afecta de manera importante a procesos de digestión, absorción y excreción de diversos nutrientes.
Un dato importante es que en la vejez hay una disminución progresiva de la masa magra y aumento de la masa grasa, esta pérdida de masa muscular se conoce como sarcopenia y afectará de manera negativa a la calidad del músculo y fuerza muscular.
La disminución del gusto y el olfato es normal a medida que avanza la edad, en algunos casos puede afectar al hecho de tener menos apetito, que puede afectar al estado de nutrición por deficiencia de nutrientes o por exceso, ya que en algunos casos podría afectar al hecho de la necesidad de condimentar más los platos con sal cosa que podría afectar a personas con hipertensión.
En cuando a los cambios gastrointestinales es importante destacar que en muchas ocasiones se produce una disminución de la enzima lactasa que es una enzima digestiva que hidroliza la lactosa, la disminución de calcio puede ser un factor de riesgo de osteoporosis, por otro lado el deterioro de la mucosa del estómago se conoce como gastritis atrófica y la incapacidad de segregar ácido clorhídrico que puede conllevar a la mala absorción de algunos nutrientes como la vitamina B12, ácido fólico, calcio y hierro.
También son conocidos los cambios en el sistema cardiovascular, entre los más importantes están los cambios en los vasos sanguíneos en especial las arterias que aumentan su grosor y pierden elasticidad, lo que en muchas ocasiones genera un aumento de la presión arterial.
En la tercera edad también hay problemas de disfagia en los cuales hay riesgo de bronco aspiración y aspiración de líquidos y por ese motivo es necesario adaptar los menús a estos pacientes modificando la textura y consistencia de los alimentos.
Otras fuentes ricas en calcio de origen vegetal son los vegetales de hoja verde, las legumbres y derivados (soja, garbanzos), semillas de sésamo, girasol y frutos secos como almendras, avellanas etc. (a estos últimos habrá que adaptar la textura por ejemplo se pueden moler).
La pérdida de dentición, la disminución de la salivación, la atrofia de la mucosa boca y la tendencia de la incompetencia del esfínter esofágico entre otros problemas dificultan la alimentación de los ancianos, por eso muchas veces se utiliza la alimentación túrmix y la texturización.
La texturización es una técnica que permite alimentar a los ancianos con una consistencia atractiva y segura en caso de disfagia, ya que dotan a los alimentos cocinados de una consistencia específica sin necesidad de llegar a ser un puré o crema.
Las dietas túrmix pueden llegar a resultar más monótonas y aburridas y las dietas texturizadas preservan mejor el sabor original de la dieta cosa que hace que la persona lleve una alimentación lo más parecida posible a lo que llevaba antes y le sea más atractivo comer, ya que se pueden apreciar los sabores, aromas y formas que los alimentos sin texturizar, pero con la ventaja que son seguros a la hora de consumir.
En este artículo te vamos a explicar cosas tan importantes como qué es la jubilación, a qué edad te puedes jubilar y otros datos para tener una buena jubilación.
La medicina paliativa mejora la calidad de vida de los pacientes y familiares en el final de la vida. Veamos a continuación de qué se trata y qué beneficios nos aporta.
La medicina preventiva en la tercera edad es básica para el bienestar de los mayores y prevenir el desarrollo de enfermedades. Adéntrate en la gerontología preventiva...
Comentarios
No hay comentarios.Añadir nuevo comentario