¿Por qué estudiar reflexología?

Hoy en día nos ha tocado vivir en una sociedad donde predomina el estrés, las prisas y el poco tiempo para dedicarse a uno mismo. Todo esto genera tensiones, dolencias, problemas físicos y mentales que nos afectan en nuestra vida diaria, tanto en el ámbito personal como psicosocial.

Cada vez es más frecuente encontrar personas que para tratar todos estos problemas generados del día a día descartan la vía tradicional debido a los efectos secundarios de la medicación o bien, escogen terapias alternativas como complemento a tratamientos médicos, viendo que, a veces, estos son insuficientes. Acudir a estas terapias ayuda al bienestar general de la persona.

Dentro de estas terapias alternativas encontramos la reflexología. Es imprescindible situar la reflexología en el contexto terapéutico al que pertenece, es decir, el entorno de las terapias naturales. Pero, ¿sabemos qué significa natural?, ¿qué es la reflexología? Entendiendo bien estos dos conceptos, podremos comprender mejor por qué estudiar reflexología. ¡Adéntrate en este mundo con un buen curso de Reflexología!

¿Qué significa natural?

Natural es todo aquello producido por la Naturaleza, sin la intervención humana. Todo lo contrario a lo artificial, que sería todo aquello producido por el ser humano, y no por la Naturaleza, y, por tanto, que sin la intervención del hombre no puede encontrarse en la Naturaleza.

Esto significa que la terapia o medicina natural, fundamentalmente, consiste en tratar a los individuos mediante la propia Naturaleza o elementos que encontremos en la misma.

Teniendo en cuenta que el objetivo fundamental de las medicinas o terapias naturales no estriba tanto en curar como en el hecho de estimular el poder autocurativo del sujeto que recibe dicha terapia, podemos clasificar las terapias naturales en tres tipos:

• Aquellas que utilizan contextos o ambientes puramente naturales, como, por ejemplo, aguas termales, baños de sol, etc.
• Las relacionadas con la ingesta de productos provenientes de la Naturaleza, sin que se utilice síntesis o manipulación excesiva que cambie por completo la naturaleza del producto.
• Las relacionadas con la manipulación de diferentes partes del cuerpo y, aunque se utilicen aparatos u objetos, manteniendo el principio de estimular el poder autocurativo del sujeto sin cambiar su estructura o funciones, como sucede en la cirugía. Aquí es donde se incluye la reflexología.

¿Qué es la reflexología?

Ante la pregunta de qué es la reflexología, podemos decir que la reflexología es una terapia natural, cuyos efectos se han podido comprobar empíricamente, que consiste en la aplicación de un estímulo mecánico en una zona concreta donde el cuerpo proyecta sus partes distalmente, a modo de reflejos. Estas manipulaciones tienen como fin estimular al propio cuerpo para que produzca reacciones que favorezcan la homeostasis en general, además de aliviar, mejorar o solucionar algunos síntomas.

La reflexología propone la existencia de unas zonas determinadas que reflejan la totalidad o parte del cuerpo. Algunas de ellas son susceptibles de ser manipuladas, consiguiendo de esta forma ciertos efectos terapéuticos. Las zonas que admiten manipulación son los pies, las manos, el rostro, la nariz, las orejas, el abdomen y la espalda, mientras que otras que no admiten manipulación, pero también reflejan el estado del cuerpo en general, son el iris y la lengua.

Los beneficios de la reflexología de las zonas manipulables son muy amplios. De entrada, produce un efecto relajante intenso que ayuda a combatir el estrés y las enfermedades derivadas del mismo. Tiene un potente efecto estimulador de la circulación sanguínea y linfática, regula las funciones de los órganos, favorece el sistema inmunológico, y estimula las diversas secreciones glandulares y la evacuación de las distintas secreciones, favoreciendo así la eliminación de toxinas y los efectos reparadores sobre el cuerpo. Si el cuerpo está libre de toxinas, encuentra por sí solo la forma de autocurarse. Si el cuerpo se libera de las toxinas y se sigue un estilo de vida natural, la consecuencia es la regeneración y el rejuvenecimiento, minimizando así los efectos del paso de los años.

¿Por qué estudiar reflexología?

Porque es una terapia natural que se debe a la salud de las personas en general. El derecho a la salud es un derecho fundamental de la persona y la cultura de la salud es un bien social, siendo el / la profesional de reflexología uno de los profesionales de la salud encargados de colaborar en el bienestar y la recuperación de la salud por medio de las técnicas de reflexología.

Porque siguiendo las características básicas y comunes de las terapias naturales, la reflexología utiliza remedios y tratamientos que son de lo más simples y menos agresivos posible, actúa en el sentido de la Naturaleza, se adapta a la naturaleza del paciente y favorece la interacción (no hay enfermedades, sino enfermos), su premisa es mejor prevenir que curar, atiende a la nutrición y estilo de vida, a los signos del paciente, trata el conjunto de la persona desde una visión holística, obtiene una reacción curativa y favorece la eliminación de toxinas, la regeneración y el rejuvenecimiento general.

Porque el principal objetivo buscado, siguiendo los principios de las terapias naturales, es estimular el poder auto-curativo representado por la fuerza vital que cada sujeto tiene en su interior. Esto se produce, sobre todo, porque la reflexología, como todas las terapias naturales, provoca en el cuerpo una reacción curativa y favorece la desintoxicación del organismo.

Viendo de forma muy resumida los beneficios que tiene la reflexología, esta puede obtener muy buenos resultados sobre:

• Aparato locomotor:

Para tratar y aliviar dolores de articulares, especialmente de la columna vertebral, parálisis y hemiplejias.

• Aparato respiratorio:

Para tratar bronquitis, amigdalitis, resfriados, etc.

• Aparato urinario y reproductor:

Para la cistitis, prostatitis, dolores y desarreglos menstruales, menopausia y esterilidad.

• Órganos de los sentidos:

Miopía, sordera, vértigo, vista cansada, etc.

• Sistema circulatorio:

Varices, problemas cardíacos, etc.

• Sistema nervioso:

Minimiza los síntomas de estrés, disminución de la ansiedad, reducción de la percepción del dolor, etc.

• Sistema inmunológico:

Incremento de las defensas en general, utilizado como terapia complementaria contra el cáncer para estimular el sistema inmunológico.

• Sistema digestivo:

Favorece la digestión y activa la evacuación.

• Niños:

Para el tratamiento de niños con parálisis cerebral, convulsiones infantiles, estreñimiento, diarrea, lloros nocturnos, amígdalas, etc.

• Para la dentadura:

Dolor de muelas.

La reflexología trata de una terapia natural que puede ser considerada complementaria o alternativa, dependiendo de su utilización, que tiene un carácter holístico, puesto que trabaja todos los componentes de la persona, tanto físicos como psico-emocionales.

¡Especialízate en Reflexología!

Además de ser una terapia que usa la manipulación de diversas zonas con el fin de conseguir ciertos efectos, también implica una relación interpersonal con los distintos clientes. Cabe tener siempre presente que estas personas acuden al reflexólogo para aliviar o solucionar algunos síntomas o molestias que pueden estar interfiriendo en su vida cotidiana. Esto puede producir que estas personas se sientan muy sensibles y vulnerables. Es primordial que el reflexólogo establezca una correcta interacción con sus clientes, básica para obtener buenos resultados, aumentando así su autoestima y confianza y ayudando al cliente en su salud emocional.

La reflexología entabla interacciones y sinergias con otros profesionales de la salud, para establecer una colaboración interdisciplinar, si se precisa, en pro de la persona que requiere sus servicios.

¿Te gusta la reflexología? ¿Son suficientes los motivos que te hemos mostrado, para estudiar reflexología? Podríamos seguir con muchos más, pero te invitamos a que los descubras tú adentrándote en el mundo de la reflexología. ¿Te animas?