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Yoga para desintoxicar el cuerpo y la mente

Yoga para desintoxicar el cuerpo y la mente

Escrito por Joan Bertran

Aquellos días que nos embarga el cansancio, el abatimiento o el estrés, cuando necesitamos desintoxicarnos mental y físicamente, ¿qué elecciones tendemos a tomar? ¿Practicamos un ejercicio saludable que no equilibre o permanecemos sedentarios? Porque de ello dependerá recuperar nuestro equilibrio.

Desintoxicar a través del yoga: cómo hacerlo

Una desintoxicación no siempre debe basarse en una rigurosa dieta o en la ingestión de determinadas hierbas y zumos. Si bien la alimentación correcta siempre ayudará y será un factor importante, podemos basar nuestra desintoxicación a nivel físico y mental a través de la práctica del yoga, de manera que sintamos una limpieza interna y una mayor energía.

Aunque la mayoría de posturas de yoga nos ayudarán en este cometido, vamos a destacar cinco, explicando la función de cada una de ellas en cuanto a la desintoxicación.

1. Parivrtta Utkatasana (postura de la silla en torsión): con los pies juntos, flexionaremos las piernas como si nos sentáramos en una silla, asegurándonos que las rodillas queden alineados con el centro de nuestros pies. Juntemos las manos hacia la zona del corazón y llevemos un codo sobre la rodilla opuesta, presionando las palmas con firmeza. Acerquemos los hombros y expandamos el pecho. El proceso se repetirá para ambos lados.

Beneficios détox: además de mejorar el estado de nuestra columna, esta postura estimula el hígado, el bazo y el sistema digestivo, mientras tonifica la zona abdominal y ayuda a los procesos de eliminación.

2. Garudasana (postura del águila): partimos con los pies juntos y los brazos a los lados, en la posición de Tadasana o la montaña. A continuación levantaremos el pie izquierdo, flexionando la rodilla. Con el pie que hemos levantado rodearemos la pierna derecha, de manera que los muslos quedan el uno contra el otro. Cruzaremos los brazos a la altura de los codos, dejando el izquierdo por encima del derecho. Juntamos las palmas con los dedos apuntando hacia arriba. Mantendremos este equilibrio mientras sea cómodo mirando un punto fija y sintiendo la inhalación y la exhalación por la nariz. Desharemos e invertiremos la posición de las piernas y los brazos para hacer de nuevo el ejercicio.

Beneficios détox: aparte de fortalecer los tobillos y gemelos, este ejercicio trabaja los muslos, caderas, hombros y parte superior de la espalda. Si presionamos bien los muslos entre ellos, generamos una mejor circulación en las piernas, lo que ayuda al sistema linfático.

3. Marichyasana (postura de torsión): partimos en posición sentada en el suelo con  las piernas estiradas hacia delante. Doblamos la pierna izquierda contra el pecho y rotamos el torso hacia la rodilla izquierda. Con el brazo derecho trataremos de rodear la rodilla izquierda. Mantendremos unas cuantas respiraciones para que la postura genere sus efectos y a continuación repetiremos el proceso con el otro lado.

Beneficios détox: esta torsión clásica del yoga nos ayuda a estimular la digestión y a la eliminación de impurezas del cuerpo. Como presionamos y en cierta forma exprimimos los órganos internos, se estimulan las funciones de los riñones y el hígado. Al liberar la torsión, un flujo de sangre nueva vuelve a recorrer estos órganos.

4. Urdva Danurasana (postura del arco): desde una posición estirada sobre la espalda, empezamos a presionar poco a poco con las manos para ir colocando con suavidad la coronilla en la esterilla. Podemos mantener las palmas en el suelo o bien los antebrazos y subimos lentamente hacia esta flexión hacia atrás o arqueamiento.

Beneficios détox: los ejercicios de apertura del tórax son fantásticos para liberar la congestión y el estancamiento del cuerpo. Son una forma también de activar nuestro metabolismo.

5. Sarvangasana (invertida sobre los hombros): empezamos estirados sobre el suelo, levantamos las piernas a noventa grados y después las llevamos hacia atrás en dirección al suelo. Colocaremos las manos en la espalda, manteniendo los codos en el suelo lo más juntos posible. Llevaremos las piernas juntas hacia arriba, alineándolas con la espalda, activaremos los muslos y el abdomen. Miramos hacia los dedos de los pies y evitamos mover la cabeza hacia los lados. Para regresar volvemos a llevar piernas hacia atrás y después la espalda regresa al suelo.

Beneficios détox: todas las posturas invertidas, como sarvangasana, ayudan a drenar el fluido linfático acumulado de las piernas y las partes superiores del cuerpo. Es una gran postura para hacer al final de una práctica de yoga, ya que todas las toxinas liberadas durante la sesión se envían hacia el corazón para que se oxigenen y se limpien.

Es bueno recordar que todas las asanas o posturas de yoga ayudan a los procesos de desintoxicación. De manera que puedes seguir tu intuición y experimentar eligiendo aquellas posturas que te pide el cuerpo. Por ello siempre debemos mantener la atención durante nuestra práctica y tomar nota de nuestras sensaciones.

Además del yoga, también puedes desintoxicar tu cuerpo con terapias como el reiki. ¿Quieres saber cuáles son los síntomas después de hacer reiki? No descartes formarte también en esta disciplina.

¿Destacarías alguna postura de yoga como especialmente beneficiosa para desintoxicar a nivel físico y mental?