Flores de Bach para dejar de fumar

El tabaco el enemigo conocido. Cada día que pasa son más las personas fumadoras que toman conciencia sobre el daño que el tabaco causa y todos los efectos negativos que puede ocasionarle en la salud tanto de ellos como de las personas que están a su alrededor. En ese momento es cuando deciden eliminarlo de sus hábitos.

A pesar de tener claro que queremos dejar de fumar, no suele ser tarea fácil, debido a las diferentes sustancias que el tabaco contiene y que producen dependencia en el organismo, como podría ser la nicotina. Existen diferentes alternativas que pueden ayudarnos a superar estos momentos complicados. Uno de ellos es sin duda, la Terapia con Flores de Bach.

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¿Cómo me pueden ayudar las flores de Bach para dejar de fumar?

Como hemos tratado en diversas ocasiones, sabemos que las flores de Bach, pueden ser de gran ayuda para tratar diferentes alteraciones del organismo que generan en un desequilibrio entre cuerpo y mente. En el caso de la dependencia al tabaco, la terapia con flores de Bach resulta muy útil como apoyo emocional en el proceso de liberación de las adicciones, ya sea para complementar otros tratamientos o como terapia única.

Al fumar, el cigarrillo desprende unos cuatro mil componentes químicos, muchos provenientes de los aditivos que el fabricante añade, con la única función de mantener «enganchado» al fumador haciéndole la experiencia de fumar lo más placentera posible. Esto confirma, que el factor psicológico suele jugar un papel fundamental en la adicción al tabaco, y es aquí donde las flores de Bach resultan tan beneficiosas:

• Para encontrar y mantener la fuerza de voluntad necesaria para dejar de fumar.

• Para tratar los estados emocionales negativos que originaron la dependencia al tabaco.

Flores de Bach que ayudan a dejar de fumar 

• Beech (Haya) – para tratar la irritabilidad e intolerancia hacia los demás que suele estar asociada con dejar de fumar.
• Centaury (Centáurea) – es la flor de Bach para reforzar la voluntad propia, ayuda a decir que no al cigarro.
• Cherry Plum (Cerasífera) – para las personas que tienen miedo a perder el control, en este caso puede resultar beneficiosa para calmar la sensación de perder el control si no hay tabaco disponible.
• Chestnut Bud (Brote de castaño) – para las personas que han intentado dejar de fumar varias veces, pero sin éxito, porque cometen los mismos errores una y otra vez.
• Gentian (Genciana) – es recomendable cuando la persona que intenta dejar de fumar se anticipa al fracaso y pierde la confianza en sí mismo.
• Gorse (Aulaga) – resulta útil cuando el fumador se desespera y pierde el ánimo de seguir adelante, esta flor le ayuda a encontrar la fuerza para superar la adicción.
• Honeysuckle (Madreselva) – esta flor ayuda a liberarse del pasado, resulta útil cuando la persona siente nostalgia hacia la época en que fumaba.
• Impatiens (Impaciencia) – para tratar la impaciencia y el nerviosismo asociado con dejar de fumar.
• Mimulus (Mímulo) – resulta útil si la persona no está segura de querer dejar de fumar, porque tiene algún miedo como podría ser a engordar.
• Mustard (Mostaza) – su uso es aconsejable si la persona se siente deprimida cuando deja de fumar. En casos de depresión extrema la flor indicada es Sweet Chestnut (Castaño dulce)
• Scleranthus (Escleranto) – para ayudar al fumador a tomar la decisión de dejarlo, si todavía no está completamente seguro de querer hacerlo (aunque sea inconscientemente).
• Walnut (Nogal) – es la flor de Bach para adaptarse a los cambios y ayudará al fumador a abandonar los hábitos antiguos relacionados con el tabaco.
• White Chestnut (Castaño de indias) – para calmar los pensamientos repetitivos e indeseados de querer fumar.

Como véis, otra de las múltiples indicaciones de la Terapia con Flores de Bach, una medicina alternativa que ofrece un apoyo emocional muy beneficioso para este proceso largo y difícil como puede ser la dependencia tabáquica.