Lenguaje verbal y no verbal en PNL
La PNL es una forma de crecimiento personal que nos puede ayudar en muchos ámbitos de nuestra vida. ¡Échale un vistazo a nuestra formación en PNL!
Tabla de contenidos
Vamos a repasar algunos conceptos PNL antes de entrar en materia
- Recordemos que la PNL es básicamente un modelo de la comunicación. Con este modelo tratamos de dar explicación al modo que tenemos de relacionarnos con nosotros mismos y con el entorno, partiendo de la base de que lo hacemos fundamentalmente a través del lenguaje. Recordemos así mismo que una premisa de la PNL es precisamente que «resulta imposible no comunicar».
- Desde el punto de vista de la comunicación, la parte no verbal es realmente importante, pues hoy día sabemos que, de media, el 80% del impacto comunicativo viene determinado por la parte no verbal.
- Existen distintos estilos comunicativos, habitualmente tendemos a conectar con mayor facilidad y satisfacción con aquellas personas con las que compartimos estilo. Así, hay personas más directas, o agresivas, otras más cercanas y cálidas, otras a las que les gusta especialmente el contacto físico y otras que no soportan que se les acerquen demasiado, o les toquen, a menos que haya un vínculo de mucha confianza. Compartir estos rasgos con nuestro interlocutor ayudará a que nos sintamos más cómodos, simpaticemos más y seamos capaces de mantener una conversación, en consecuencia, más fluida.
¿Y que entendemos por no verbal?
Cuando usamos este calificativo nos referimos a todo aquello que decimos sin palabras, a través de gestos, tono, volumen, gestos corporales y faciales, pausas y silencios. Todo ello es capaz de transformar en su totalidad el mensaje verbal que estemos trasladando a nuestro interlocutor. Seguro que eres capaz de pensar innumerables ejemplos de ello. Pensemos en el caso extremo de insultar a alguien, nada tendrá que ver si lo hacemos con una sonrisa, un golpecito en la espalda y un tono suave y jocoso.
No nos olvidemos aquí de la distancia interpersonal (distancia íntima de 0 a 0.5 m; distancia personal de 0.5 a 1.20 m; y distancia social de 1.20 a 3.60 m). Este es un factor de gran relevancia y que puede ser una gran barrera comunicativa si no se tiene en cuenta. Seguro que en alguna ocasión te has sentido invadido por alguien que insiste en acercarse para hablar contigo, a eso nos referimos. Y es que existen distintas distancias sociales, adecuadas o no según el nivel de intimidad que tengamos con cada persona. Además, a esto hay que sumarle las evidentes diferencias individuales y culturales.
No se nos escape mencionar por tanto la importancia de la diversidad cultural en cuanto a comunicación no verbal se refiere. Los mismos gestos o comportamientos pueden ser interpretados de manera totalmente diferente por distintas culturas.
Pues bien, la siguiente pregunta sería ¿Qué tiene que ver todo esto con la PNL?
Como modelo comunicativo y de intervención psicológica, la PNL tiene muy en cuenta todos estos elementos para conseguir un mejor trabajo con nuestros clientes o pacientes. Así, en todo momento estaremos muy pendientes de cuidar nuestra comunicación, tanto verbal como no verbal para favorecer el proceso de cambio de nuestro interlocutor, que es quien nos ha solicitado ayuda.
¿Y cómo lo hacemos?
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El lenguaje verbal:
Este parece que todos lo tenemos más presente, cuidar lo que decimos es importante, y en PNL no vamos a ser menos.
Destacamos aquí algunas cuestiones claves que deberemos tener presentes a lo largo de una intervención, puesto que hay una información “mínima” que necesitaremos para empezar a trabajar:
- Quién
- Qué
- Por qué
- Para qué
- Para quién
- Con qué efectos
A medida que planteamos estas y otras cuestiones a nuestro interlocutor debemos mantener siempre una escucha activa, pues es sin duda otro factor clave en la comunicación y especialmente en la propuesta de la PNL.
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El lenguaje no verbal:
A parte de lo mencionado con anterioridad, cabe poner énfasis en el hecho de que es precisamente a través de este lenguaje que somos capaces de expresar más rápidamente nuestros estados internos y emociones. Esta es una capacidad aprendida y compartida por los miembros de una misma cultura. Así seremos capaces de reconocer fácilmente y solo con mirarle, si una persona está alegre, triste, aburrida, preocupada, con miedo, enfado o asombro y/o sorpresa.
Con todo esto la PNL trata de optimizar su eficacia aprovechando a su favor los componentes de la comunicación. Si somos capaces de entender y dominar estos aspectos claves conseguiremos llegar de forma más exitosa a nuestro interlocutor, y guiarle mejor en su proceso de cambio, eso por no mencionar la gran utilidad que por sí solo tiene el hecho de compartir esta información y ayudar a que nuestros clientes/pacientes dominen mejor las habilidades comunicativas en sus relaciones.