¿Qué hace un programador neurolingüístico?

Si repasamos las bases de la PNL podremos empezar a hacernos una idea de cuál es nuestro trabajo.

¿De dónde viene el nombre programador neurolingüístico?

• Programación:

Utilizando la analogía del ordenador, se refiere a las diferentes maneras que tenemos de organizar nuestras informaciones y del modo en que estas organizaciones nos afectan en los diferentes resultados deseados.

• Neuro:

La presunción por parte de PNL de que todo comportamiento es el resultado de los diferentes procesos neurológicos que se ponen en funcionamiento a través de nuestro organismo.

• Lingüística:

Hace referencia a toda la expresión comunicativa de la persona, tanto consigo misma como con lo que la rodea. Además, si consideramos el organismo como un todo, debemos entender como lenguaje toda expresión fisiológica, de ahí la premisa de que “no es posible no comunicar”.

Así un experto en PNL trata de ayudar a sus pacientes a cambiar la forma de relacionarse con ellos mismos y con su entorno, apoyándose en la principal forma que tenemos de vincularnos y relacionarnos, la comunicación. El modo en que nos hablamos, en que construimos nuestras interpretaciones de la realidad, marcará sin duda la forma que tenemos de estar presentes, de sentirnos motivados o abrumados, de estar confiados o frustrados… Así pues para cambiar nuestra vida un paso esencial es modificar la forma en que nos aproximamos al mundo y a las personas que nos rodean, para alcanzar una forma sana de relación.

Lo que perseguimos es generar un cambio en nuestro cliente, consiguiendo que logre transformar su mundo de percepciones e interpretación del mundo.

Los mapas mentales

La PNL utiliza como concepto nuclear el de mapa mental para referirse a la visión del mundo y de las cosas que hace cada persona según su experiencia, cultura, generación, lugar de origen y cualquier otro filtro por el que pasan nuestras percepciones de la realidad. De ahí que una frase muy utilizada de la PNL es que “el mapa no es el territorio”, precisamente para diferenciar «lo que es» de “lo que cada uno interpreta que es”.

Cuando trabajamos desde esta perspectiva será fundamental entender el mapa mental de nuestro interlocutor para tratar de adaptarnos y generar una comunicación fluida.

Así pues para la PNL la buena comunicación no solo es comprender el mapa del otro, sino que el otro comprenda que lo hemos comprendido. A esto desde la PNL le llamamos generar reporte.  Esto es fundamental en la comunicación de nuestro día a día pero especialmente cuando a través de nuestra comunicación pretendemos conseguir un objetivo.

Desde ahí un experto en PNL tiene muy presentes los siguientes principios:

• Las personas pueden cambiar.
• Las personas tienen todos los recursos que necesitan para cambiar.
• Todos los comportamientos tienen siempre una intención positiva (no somos autodestructivos)
• Las personas siempre realizan la mejor elección posible en el momento de su decisión y para ello se basan en los recursos entonces disponibles
• Nuestra representación interna del mundo, no es el mundo mismo, sino únicamente una aproximación reducida.
• Nuestras representaciones del mundo son realizadas a través de la información captada por los canales sensoriales
• No hay nada bueno ni malo intrínsecamente, es el pensamiento el que lo hace tal.
• En la comunicación no hay fracasos, solo información. No hay errores, solo resultados
• El 93% del impacto de nuestra comunicación es no verbal.
• Las personas tenemos dos niveles de comunicación: consciente e inconsciente.
• La flexibilidad es indispensable.
• Si continuas haciendo lo que siempre has hecho, no irás más allá de dónde has llegado.
• El cuerpo y la mente son un solo sistema.

Y con todo esto se trabaja para ayudar a nuestros pacientes y/o clientes, que acuden a nuestra consulta normalmente con las ganas y la ilusión de terminar con algún padecimiento.

Desde este enfoque buscamos que cada persona sea el impulsor de su propio cambio, por lo tanto la motivación pasa a ser un elemento fundamental, ya que uno de los supuestos básicos es que “las personas cambian, pero lo hacen cuando ellas creen que es la mejor manera de garantizar su supervivencia y/o bienestar”. Esto es muy importante, ya que a menudo nuestro trabajo pasa por redefinir objetivos para que conseguir que la motivación sea intrínseca, y se pueda mantener. A menudo las metas inabarcables y mal enfocadas hacen decaer la motivación al mínimo traspié, así tendemos a creer que la persona no quiere cambiar, y no siempre así, a veces hay que reorientar el cambio de tal manera que la persona se vea capaz.

Un experto en PNL te acompaña, te ayuda a que hagas los cambios necesarios para ser más eficaz y resolutivo, pero no olvidemos que como siempre uno mismo es el principal motor de su propio crecimiento y evolución.